Los 8 puntos esenciales de la innovación

Los 8 puntos esenciales de la innovación

Autor: Kraz Team
octubre 19, 2022

Las empresas que invierten en innovación poseen ventajas estratégicas y organizacionales que las hacen prevalecer sobre las grandes empresas. Mientras que estas tienden a ser grandes ejecutoras y poseen una enorme infraestructura, no destacan precisamente por su capacidad de innovación, puesto que ya están establecidas en el mercado. 

La creatividad de los proyectos innovadores se enfoca en optimizar negocios ya existentes, lo que les sitúa en una posición de ventaja. A continuación veremos algunos de los puntos esenciales que caracterizan el papel de la innovación en las empresas, de acuerdo con una interesante presentación de Nathan Marston, antiguo director de la prestigiosa consultora empresarial McKinsey.

Elementos esenciales de la innovación

Una de las cuestiones principales que se explica en esta presentación de Nathan Marston es el papel cada vez más relevante de la innovación para impulsar el crecimiento de las empresas. A partir de un estudio con encuestas realizadas a más de 2.500 ejecutivos de más de 3000 compañías, se han podido sintetizar los ocho elementos que las grandes empresas consideran esenciales al potenciar la innovación de procesos, productos y modelos de negocio.

Aunque no existe una fórmula mágica para la innovación, los aspectos analizados en esta presentación muestran signos de que existe una relación causal entre los ocho elementos destacados por los encuestados y el papel de la innovación en algunas empresas analizadas por la consultora Mckinsey, si bien solamente es posible probar la correlación.

Los 8 elementos de la innovación se pueden dividir en 2 grupos. Los primeros son de naturaleza estratégica y están orientados a establecer los términos en los que hay más probabilidades de que la innovación tenga éxito. Los otros cuatro siguientes están orientados a explicar cómo organizar la innovación a lo largo del tiempo, de forma que resulte diferencial y permita contribuir de forma sustancial al rendimiento general de la empresa. Estos elementos son: 

  1. Aspirar
  2. Elegir
  3. Descubirir
  4. Evolucionar
  5. Acelerar
  6. Escala
  7. Expandir
  8. Promover

Adaptarse a la era digital, donde los cambios se producen de forma acelerada, requiere que las empresas asimilen estos elementos de acuerdo con su contexto, cultura de empresa, capacidades y nivel de riesgo habitualmente aceptado.

 

Los 6 elementos de innovación en las empresasFuente: McKinsey

 

1. Aspirar

El primer elemento esencial para la innovación es aspirar a un objetivo de alto nivel. Tener una visión amplia puede ser el catalizador que ayude a estimular la acción de la empresa. No obstante, sabemos que en el mundo empresarial las palabras no son suficientes. Es necesario saber combinar las más altas aspiraciones con la estimación del valor que la innovación ayudará a generar para potenciar el crecimiento financiero de la organización.

Por tanto, no se trata de innovar por innovar, sino de tratar de cuantificar en qué medida el objetivo de innovación al que aspira la empresa contribuye al crecimiento. Este paso permitirá convertirlo en una parte primordial de los planes estratégicos futuros de la empresa, asentando así el peso de la innovación en la organización. La innovación implica riesgo, y la tendencia es que los gerentes traten de minimizar el riesgo. El objetivo de alto nivel debe ser, por tanto, lo suficientemente importante como para que los directivos incluyan inversiones en innovación en sus planes de negocio. 

Establecer objetivos innovadores cuantificables, aunque importante, no es suficiente. Debe transmitirse el valor objetivo de la innovación a las organizaciones a través de la configuración de KPI’s específicos. Si no se traslada el plan de innovación al ámbito operativo y si no se miden los parámetros de desempeño, se corre el riesgo de que nadie realmente se ocupe de la innovación.

Un ejemplo es el caso de la cooperativa Lantmänen. A pesar de que sus ejecutivos desarrollaron una visión amplia y ambiciosa, así como un plan estratégico cuantificable y asociado a objetivos financieros, a nivel operativo se vio desafiada por la falta de dirección. Por este motivo, el plan que se adoptó fue distribuir los objetivos cuantitativos en cascada a las distintas unidades de negocio y equipos de producto. Además, se establecieron mecanismos para mostrar cómo las acciones de innovación estaban ayudando a conseguir los objetivos de crecimiento en cada categoría y mercado. El resultado fue un crecimiento económico que pasó del 4% al 13% anual, convirtiéndose en el líder del mercado de comida prefabricada.

Imagen de la web de Lantmänen

 

2. Elegir

Uno de los desafíos de las empresas en el ámbito de la innovación es elegir qué ideas deben apoyar y escalar. En las empresas de mayor tamaño, esto puede resultar problemático cuando se producen cambios disruptivos en el mercado. Al principio, adaptarse a una ola de crecimiento puede parecer muy arriesgado, pero más tarde las empresas tienen que adaptarse de forma dolorosa para poder seguir siendo competitivas.

Las empresas, por tanto, tratan de administrar los riesgos a la hora de poner en marcha iniciativas de innovación. Puesto que nadie sabe con exactitud qué innovaciones van a funcionar, e investigar en todas las direcciones no resulta funcional, es necesario que la dirección de la empresa establezca unas condiciones para determinar las oportunidades de innovación en las que se desea explorar. 

El proceso de elegir ideas innovadoras implica tener en cuenta tanto visiones de futuro intuitivas como análisis estratégicos cuidadosamente estudiados. Priorizar determinadas áreas de oportunidad de forma previa permite valorar si la empresa cuenta con suficiente inversión para determinar las oportunidades más valiosas.

Las empresas deberían poner en marcha más proyectos de los que pueden financiar, de manera que sea más fácil cerrar aquellos que no estén resultando interesantes. Una vez que están bien delimitadas las oportunidades, es primordial que las empresas sean transparentes con los empleados que trabajan en el proyecto y establezcan un sistema para medir el valor esperado, el riesgo de la iniciativa y el momento en el que se pone en marcha.

Muchas empresas se equivocan al seguir avanzando con un exceso de proyectos de innovación que, sin embargo, tienen pocas posibilidades de alcanzar sus objetivos de crecimiento o circunscribirse a los parámetros de riesgo establecidos. Otro error es el de dispersarse en excesivos proyectos, en lugar de enfocarse en aquellos que tienen un mayor potencial de éxito y dotarlos de mayores recursos.

 

3. Descubrir

El proceso de conocer los insights es una parte fundamental de la innovación. Por lo general, la innovación se enfoca en resolver un problema, encontrar una tecnología que aporte una solución o diseñar un modelo de negocio que genere rentabilidad. Prácticamente todas las innovaciones de éxito se encuentran en la adecuada combinación de estos tres elementos. Las empresas que logran sintetizar soluciones únicas para estos tres elementos y, a la vez, consiguen un conocimiento más profundo de las futuras tecnologías y cómo estás pueden utilizarse, podrán obtener un mejor retorno.

Debe tenerse en cuenta también que una de las características del conocimiento es que es iterativo. El uso activo de nuevos prototipos ayuda a las empresas a seguir aprendiendo a medida que se van desarrollando, probando, validando y perfeccionando distintas innovaciones. En todo caso, es vital que exista un sistema de innovación que considere los demás puntos esenciales de la innovación. Por muy efectivo que sea el proceso de generación del conocimiento, por sí solo no es suficiente para garantizar el éxito.

4. Evolucionar

Las innovaciones orientadas a transformar el modelo de negocio son una parte fundamental en una cartera de proyectos de innovación. Es necesario reinventar el modelo comercial de los negocios, a medida que nuevas tecnologías como los smartphones y las apps móviles han ido revolucionando el mercado. No obstante, vemos que la mayoría de sistemas de innovación están principalmente orientados al desarrollo de productos. El motivo de esta realidad es que las grandes empresas son reacias a asumir el riesgo de alterar su modelo de negocio, a menos que presente claras ineficiencias y se vea amenazado. Y en ese momento, lo único que pueden hacer es tratar de minimizar las pérdidas y tratar de no llegar demasiado tarde.

Las empresas líderes en innovación se esfuerzan en mejorar su inteligencia de mercado para abordar esta realidad. Crean sistemas de financiación para nuevos modelos de negocio que no se ajusten a la estructura actual. Reevalúan su posición en la cadena de valor de forma constante, considerando los modelos de negocio alternativos que podrían aportar valor a nuevos clientes. Además, pueden patrocinar proyectos piloto fuera del modelo de negocio central y poner a prueba distintas propuestas de valor emergentes y modelos operativos que les permitan contraatacar a la competencia. 

 

5. Acelerar

En muchas ocasiones las empresas pueden convertirse en su peor enemigo a la hora de innovar. Los procesos de aprobación y validación y las excesivas tareas administrativas en el área legal, marketing o TI pueden obligar a retrasar numerosos proyectos. De hecho, muchos proyectos de innovación han salido adelante gracias a inconformistas, que lograron eludir los procesos de aprobación. 

Lo ideal es tratar de mantener el equilibrio. Aunque es necesario controlar los procedimientos burocráticos, no hay que permitir que la prisa por llegar al mercado pueda perjudicar a la colaboración entre equipos y las rutas de decisión necesarias para facilitar la innovación. 

Las empresas que tienen éxito en la innovación generalmente han probado sus ideas con los clientes al principio del proceso, antes de que la estructura administrativa de la organización pueda crear modificaciones que afecten al valor de la idea. Un aspecto esencial para lograr la innovación deseada es eliminar las barreras que se interponen entre la idea y el usuario final que se va a beneficiar de ella. En este sentido, que el gerente esté involucrado en el proyecto y se responsabilice del presupuesto y especificaciones clave influirá en que la innovación pueda llegar a materializarse.

Un aspecto de gran relevancia es que el equipo sea multifuncional. Los integrantes del proyecto deben trabajar en un solo espacio y dedicar una parte significativa de su jornada, de manera que pueda existir una cultura que priorice el éxito de la innovación a las meras acciones de ejecución. La colaboración multifuncional entre los integrantes del proyecto implica la participación del usuario en el proceso de desarrollo. El área de marketing juega aquí un papel fundamental en la defensa de los intereses de los usuarios finales, al mismo tiempo que los equipos de desarrollo se enfocan en los productos y trabajan para garantizar que el resultado final se ajuste a las necesidades del usuario. No obstante, otras empresas son también conscientes de que los consumidores no siempre saben lo que quieren hasta que lo tienen disponible. 

Ambas visiones pueden complementarse, ya que los clientes son importantes para poder decir lo que no les gusta, y los comentarios de los usuarios finales pueden ayudar a que se logre el resultado final se consiga más rápidamente.

 

6. Escala

Algunas ideas innovadoras están destinadas a nichos específicos de mercado. Otras pueden aplicarse a escala global. Resulta de gran importancia considerar el alcance apropiado de cada idea, de manera que se puedan utilizar los recursos adecuados, así como valorar los riesgos de su desarrollo.

La opción que en apariencia resulta más segura puede resultar perjudicial a largo plazo para la empresa. Los recursos y capacidades deben organizarse de manera que se pueda lograr la entrega del producto o servicio en el tiempo y calidad deseados. Todos los elementos del proceso, desde las instalaciones de producción hasta los proveedores y distribuidores deben estar preparados para implementar el proyecto de innovación de manera rápida e integral.

 

7. Expandir

En pocos años, las empresas de casi todos los sectores han aceptado que innovar implica utilizar colaboradores externos. Los flujos de talento y conocimiento que utilizan las empresas no se pueden ver limitados por fronteras geográficas o corporativas. Las empresas innovadoras utilizan las habilidades y talentos de otros para acelerar la innovación y descubrir nuevas formas de crear valor para sus clientes.

La colaboración con otros partners va más allá de la obtención de nuevos conocimientos que ayuden a la innovación. A veces puede implicar también compartir costes y encontrar nuevas vías para llegar al mercado. Las empresas que tienen un alto rendimiento en innovación trabajan para crear ecosistemas que ayuden a lograr estos objetivos. De hecho, se esfuerzan para convertirse en socios prioritarios, lo que aumenta la probabilidad de que las mejores ideas y personas pasen a formar parte del proyecto.

Para que la innovación cuente con colaboradores externos, es necesario adoptar un enfoque sistemático. Las empresas deben averiguar con qué socios trabajan y decidir qué redes van a utilizar para respaldar sus estrategias. De esta forma, pueden acotar y centrar sus esfuerzos de colaboración de manera más eficaz. Las empresas más innovadoras revisan periódicamente sus redes de colaboradores, las amplían o los recortan, o establecen incentivos y modelos contractuales para potenciar a los partners que mejor rendimiento están logrando.

Convertirse en un partner de confianza implica, entre otras cosas, promover las ventajas para los nuevos colaboradores, como marca o alcance del proyecto. Una de las características de todo partner prioritario es que recibirá también un trato justo y transparente en todas sus relaciones con la empresa.

Por lo demás, cabe destacar que las empresas aprovechan las redes externas son conscientes de qué acciones son más útiles en cada etapa del proceso de innovación. Por eso, aunque al principio pueden contar con una red amplia de colaboradores, a medida que se acerca el momento de sacar al mercado un producto o servicio, se vuelven más exigentes en sus necesidades, puesto que el diseño de la nueva oferta está casi terminado.

 

8. Promover

Las empresas líderes en innovación encuentran diferentes formas de integrar la innovación en la cultura de la empresa a todos los niveles. El primer paso, como se ha apuntado antes, es establecer las aspiraciones para crear conexiones entre innovación, estrategia y desempeño. Cuando se establecen objetivos financieros, los empleados pueden estar mejor enfocados. A medida que dichas aspiraciones se van trasladando a proyectos específicos, los líderes de proyecto aclaran las distintas responsabilidades de cada uno y establecen los incentivos y recompensas de los participantes.

La innovación es una de las métricas estándar que se encuentran en los cuadros de mando de la empresa. Esto ayuda a involucrar a toda la organización. Los cambios organizacionales implican la necesidad de promover la colaboración, el aprendizaje y la experimentación entre los participantes. Las empresas deben promover que los partners y empleados dedicados a la innovación puedan compartir ideas y conocimientos de forma libre. Existen para ello varias formas de hacerlo: ubicar equipos que trabajan en el mismo proyecto de innovación en el mismo lugar; revisar la estructura de los equipos de proyecto; asegurar los conocimientos adquiridos a partir de las experiencias de éxito y fracaso; reconocer los esfuerzos de innovación incluso cuando no se logren los objetivos.

La colaboración puede tardar mucho tiempo en lograrse en empresas grandes, con culturas de empresa altamente consolidadas y formas de trabajar que, en otros aspectos, pueden haber sido útiles. Algunas organizaciones utilizan “garajes” o pequeños centros de innovación, donde los grupos de trabajo trabajan en distintos proyectos innovadores, sin las restricciones que supone el entorno laboral normal. Esto les permite crear nuevas formas de trabajo que pueden integrarse a nivel organizacional.

 

La búsqueda de la excelencia en la innovación. Una tarea pendiente de las grandes empresas

A la vista de la presentación de la consultora Mckinsey, vemos que las grandes empresas no son capaces de convertirse fácilmente en líderes de innovación. Existen demasiadas rutinas inamovibles y facturas de cultura organizacional que pueden perjudicar al proceso. En muchos casos, encontrar la excelencia en innovación es un proceso que se construye a través de un esfuerzo de muchos años y que implica a la mayor parte de la organización.

Los datos arrojados por esta presentación muestran que tener en cuenta estos ocho puntos esenciales para la innovación aumenta la probabilidad de éxito. En su conjunto, aplicar estos aspectos ayudará a desarrollar un sistema operativo esencial para potenciar la innovación dentro de la estructura organizativa de toda empresa.

Desde Kraz ayudamos a las marcas a desarrollar procesos de innovación gracias al análisis de datos. Por eso, si estás pensando en dar este paso, en Kraz, como consultora analítica que somos, estaremos encantados de poder ayudarte. ¡No lo dudes y contacta con nosotros! 

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